Querida
señorita R:
Mientras
platicaba, me di cuenta que estaba haciendo demasiadas referencias a películas,
creo que ya eran como 3 referencias. Demasiadas para lo que recuerdo haber
hecho nunca. Y todas me servían plenamente para ilustrar lo que quería decir. O
sea, no eran referencias gratuitas, sacadas de la manga, sino que cumplían
plenamente su función. Entonces, una parte de mí, subterránea, guardó la
observación con una pequeña nota: «para platicarle a alguien que
como yo, disfruta mucho de las elipsis». De acuerdo, esa última
palabra, «elipsis», acaba
de aparecer, no estaba en la experiencia inmediata a la que refiero, pero que
me sirve, ahora, para poder decir que, en aquél momento, de manera muy sutil
quería hacer el comentario a alguien de que, para alguien a quien el cine le
parecería una trivialidad insignificante (hay trivialidades no tan
insignificantes), eso era demasiado.
Y
bueno, el párrafo anterior ha sido de un solo aliento, y después lo he revisado
y no ha estado tan mal. Bien, me dispongo a contarte cosas, a estas horas de la
noche (2:30 de la madrugada) que vengo de una velada en la que he tomado mucho
vino, pero que aún estoy lúcido, o más o menos, empezaba a ver la película de
Luca Guadagnino esa que va de chavales que comen gente, (que me recuerda a la
película de Ducournau que recuerdo que no te gustó tanto como a mí, la de las hermanas
caníbales), y como es la última película que pienso ver en este año para que
sean exactamente 200 películas en mi lista (he visto más pero no las pongo
porque son para niños pues las he visto con mi sobrino entre otras que mejor
olvidar), y pues, es inevitable pensar en ti con una intensidad que pongo en
duda en el hecho de que no esté enamorado de ti.
De
acuerdo, ni te conozco ni nada. Y pienso que…mejor antes de entrar a temas
escabrosos, mejor te digo que te dejo esta lista de 200 películas que vi en el
lapso de 2 años y que, según nuestra costumbre que teníamos, te comparto para
que te rías o burles o te alegres de que compartamos gustos o lo que tú más
quieras.
Y ya
eso es todo, me voy porque esto se está volviendo infinito y porque quiero
seguir emborrachándome.
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